¿Es que siempre insistirían en eso? Se suponía que era Trabajo, simplemente asistir a darle clases a gente incompetente, pero los profesores no estaban felices solo con ello. Se fijó en la hora que marcaba el reloj en su muñequera, eran las tres de la tarde y todavía le quedaban dos clases más que impartir, por suerte ese día no tendría que ir al laboratorio. Tomó un termo con café de la sala de maestros junto con su maletín y se dirigió al sexto edificio.—«Solo son un montón de viejos borrachos—se quejó mentalmente mientras caminaba con el café a medio tomar—que mierda es esa de: "Debe ser más sociable Profesor Tatsumi"—puso los ojos en blanco, haciendo una nota mental, de que debería ir a tomar al menos una vez con los demás maestros aunque fueran un montón de viejos borrachos, los dos días anteriores se le fueron de las manos, simplemente pasar tiempo con su familia y dormir, había sido un buen fin de semana. Si no fuera porque la mayor parte del tiempo Morinaga le lanzaba miradas vagas y después se alejaba— ¿Y que se supone que hare con el sobre de ese tipo?»—soto un suspiro borrando todo de su mente, bajo el termo y vio una silueta borrosa a lo lejos, esta agito en alto una mano y corrió hacia él. Era una chica, Mei.— ¡Souichi, me alegra verte!—Se pasa una mano por el antebrazo respirando con dificultad, sube la mirada por segundos para toarse con un ojos confundidos que ponen nerviosa enseguida—Yo…bueno la junta, se…-Nó đã phát triển vào ngày hôm nay?-bị gián đoạn bởi do dự nhưng không hiển thị điểm yếu trong giọng nói của mình. Các cô gái lớn lên mắt và phác thảo một nụ cười.-Vâng, chính xác điều đó, cũng... nghĩ rằng, kể từ khi nó đã đến trên tàu, chúng tôi có thể để lại vào ngày hôm nay.-«Xuất cảnh, người nói? - Souichi nâng lên một lông mày mà Mei từ má, tôi đã quên nó - và ngày hôm nay...»-Nếu bạn ở lại im lặng, có sự im lặng của bạn như là một...-Không, ngày, được rồi - anh không biết rất tốt từ đó đã được tất cả rằng, thu hồi điều mơ hồ và sau đó vội vàng đến lớp học, đã để impart một thực tế.Mei là sáng mắt, mặc dù để đáp ứng Souichi không tìm thấy những gì mong đợi, gia nhập ngón tay lúc chiều cao của thắt lưng để thực hiện một tôn kính và đi bộ đi từ đường. Các cô gái đã bí mật sau khi đưa ra một vài bước theo hướng đối diện, nhìn thấy như thế nào tóc vàng l chuyển đi xuống hội trường.Hội đồng quản trị ủy ban là một trong hầu hết mọi thứ fucking nhàm chán và nó có vẻ như là nếu hai mỗi tuần đến chúng trên thế giới hơn. Souichi bit thấp hơn môi và răng, click vào để nghe như họ nói rằng kết thúc hội nghị thường niên. Ông đặt bàn tay của mình trên bảng để đẩy các ghế trở lại, nhưng đã không làm việc, một trong những bàn tay đã đổ bộ lên cánh tay của cô, quay lại để xem anh ta, là giáo sư Fukushima. Chuyển sang gặp phải một cử chỉ mỉm cười nói cho anh ta để ở, rút lui ngay lập tức, hạ thấp vai của mình và thả bảng. -«lời nguyền»Y los ojos comenzaban a pesarle, ¿es que nunca se iban a callar? Pensó molesto por el tipo de conversación. Eso ya no tenía nada que ver con la universidad, sino con su vida. Qué demonios le interesaba a el saber cuántas novias tuvieron viejos de más de cincuenta años y las aventuras con sus ex esposas, sintió su celular vibrar en el bolsillo trasero. Dio un vistazo a los demás y encendió la pantalla.Morinaga Tetsuhiro.Asunto: ¡Noche de películas!¡Voy en camino! ¿Quieres que pase por palomitas para la película?Souichi frunció el entrecejo, subió la vista al ver que la plática no tendría fin. Se puso de pie con una reverencia.—Disculpen la interrupción, pero debo retirarme—los presentes guardaron silencio, y Souichi comenzó a tomar sus cosas, al parecer no lo detendrían.—No te vayas Tatsumi, vamos a comer algo a un restaurante cercano—uno de los profesores se escuchó de fondo, era el de mas ex esposas.—Si, Souichi, deberías convivir más con los profesores—el profesor Fukushima le puso una palma sobre el hombro, haciéndole un gesto de comprensión, después añadió en vos baja—vamos Souichi, come un rato con estos viejos y después te retiras.Forzó una sonrisa y se dirigió a la entrada, con los demás siguiéndole.Re: Morinaga Tetsuhiro.Dejémoslo para mañana, no podré llegar temprano. Lo siento.Sintió como perdía el equilibrio mientras veía como se mandaba el mensaje, volteo hacia los lados, para ver que alguien le había dado un empujón en la espalda. Bloqueo el celular y se metió al auto de uno de los profesores..Tecleo rápidamente una respuesta, un poco decaído.Re: Souichi TatsumiOh no te preocupes, ¡esfuérzate! Te espero en la cama, te amo.Dejo escapar un suspiro y salió de la tienda de conveniencia. Todavía no anochecía y no estaba de ánimos para llegar al departamento. Cambio de camino y siguió derecho hacia el bar Gay donde trabajaba Hiroto.Cruzo la puerta, y se sintió melancólico al escuchar como la campanita indicaba que otro cliente llegaba. Tenía un tiempo de no ir al bar, y también de no haber hablado con Hiroto, que al verlo abrió los ojos en par y le saludo desde la barra. En todas las mesas veía caras nuevas.—Parece que hay muchos clientes nuevos—sonrió al tomar su asiento frente a la barra, y pedir un trago que a respuesta Hiroto de giño un ojo.—Aquí tienes Angelito—de sitio una copa y dejo su brazo derecho descansando en la cadera observando a los demás clientes—si, el bar está lleno de material nuevo.— ¡Que dices Hiroto!—Morinaga soltó una carcajada—hace mucho que utilizábamos esas frases.Hiroto igualo su risa, y se acercó a su rostro, examinando sus gestos después soltó un chasquido.—No sé qué hace un hombre ocupado—Morinaga frunció los labios en una pequeña mueca, como si fingiera pensar—y no precisamente en el trabajo.
—Venia de paso.
—Ja, me crees estúpido. De seguro es porque tu parejita esta en otra parte que no es tu cama.
—Si, bueno…—Morinaga rolo los ojos, ¿demonios, realmente era tan trasparente?—llegara algo tarde.
— ¿Y después le darás duro por detrás?—Morinaga se sonrojo al escuchar lo que decía Hiroto, se tomó el trago de un solo tirón y se rasco la mejilla, no parecía mala idea— ¿no han tenido problemas? ¿No vienes porque te la pasas teniendo sexo con él?
Eso sonaba a queja. Al ver los ojos de Hiroto supo que definitivamente lo era.
—Vamos Hiroto, no he venido por el trabajo. Pero si pudiera dar el lote con Souichi todas las noches, no iría a ningún lado—dijo entre disimuladas risas, a lo que Hiroto le dio un leve golpe en la cabeza y le sonrió.
—Si a mí me dieran todas las noches, tampoco lo haría—le giño un ojo y se giró hacia otro cliente—o quién sabe.
Si habían tenido problemas, pero lo habían arreglado…de alguna manera. Fijo la vista en su nuevo trago. Ahora solo faltaba esperar hasta mañana en la noche.
.
—Hiroto—arrastro la voz, entre lloriqueos—Souichi me ha vuelto a cancelar.
Hiroto volvió a limpiar la barra con los labios fruncidos como si pensara seriamente algo, le dio una respuesta vaga, vamos con una o dos veces que le cancelara no era para tanto. Se sorprendió a sí mismo, ¿Cómo había llegado a defender al tirano ese, y hasta darle la razón?
—Si estas tan preocupado angelito, ¿Por qué no le llamas?—se acercó a su oído y le susurro—una llamadita para asegurar la mercancía.
Morinaga titubeó, con la pantalla encendida frente a él, busco en contacto en la agenda y se pensó dos veces si marcarle o no.
—no, no creo que sea buena idea Hiroto—bloqueo el teléfono y lo dejo sobre la barra, para después soltar al mismo tiempo que su amigo un gran suspiro.
— ¿Y qué harás, quedarte con la duda?
Morinaga levanto una ceja.
— ¿duda?
—Bueno no insinuó nada, pero pareces león enjaulado volteando a todos lados, me asustas.
Tenía razón, estaba siendo un exagerado, pero esa mañana no se habían topado, y para ser sincero no tenía seguridad siquiera de que Souichi llegara a casa.
Giro la llave y la puerta del departamento se abrió sola, dejando entrar una ráfaga caliente de aire. Las luces estaban apagadas, hiso algo rápido y lo envolvió en aluminio con una nota en la mesita de centro, si Souichi llegaba demasiado tarde no iría a la cocina, así que mejor en un lugar más visible. Se desabrocho la corbata, al igual que dejo el traje en el respaldo del sofá. Estaba exhausto, en dos días seria la firma del contrato, del proyecto del cual estaba encargado y estaba muy estresado debido a eso. Echo un vistazo al reloj de pared 1:37am, apenas alcanzaría a dormir cuatro horas, con la vista fija en la entrada cerró la puerta de su habitación, esperando que Souichi solo no se estuviera exigiendo demasiado.
Frunció el ceño al ver la nota como la cena intacta, y el celular sin ningún mensaje o llamada perdida. ¿Le habrá pasado algo? su mente empezó a caer en un abismo, Souichi no estaba en el departamento, corrió a la habitación, para encontrarse con un bulto de ropa sucia en una esquina, en ese mismo instante, la puerta del baño se abrió.
—Buenas…—Morinaga se enderezó, para ver la figura de Souichi a medio vestir parada justo frente a él. Venia saliendo de la regadera, con el cabello mojado, reacciono al ver que fruncía los labios incomodo— ¿Qué haces ahí parado? se te hará tarde.
Morinaga se avergonzó, contestando con una afirmación, camino hacia él, percatándose de que solo traía bóxer. El nudo en la garganta desapareció, se acercó lentamente a su cara, dejando a Souichi perplejo mientras le observaba. Por su cabeza pasaron un par de situaciones deseables, e incluso sus manos cosquillaban por tocar su cuerpo. No pudo resistirse y tomo la cara de Souichi entre sus palmas, se acercó con gentileza y junto sus labios con los de él, sintiendo su fresco aroma.
—Buenos días amor—sé separó lentamente, dejando unos segundos de contacto visual, Souichi se quedó en silencio, perdido en los ojos de Morinaga, sus mejillas se calentaron, pero reacciono demasiado tarde.
Ver cómo Morinaga desaparecía e
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